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Principales causas de los gases intestinales
Durante el proceso de digestión es totalmente normal la presencia de gases intestinales en el sistema digestivo y la eliminación del exceso mediante flatulencias y eructos. Ahora bien, si el gas no se elimina y queda retenido o no se mueve con facilidad por el tracto digestivo, puede producir dolor y molestias.
El gas puede acumularse en el estómago o en el intestino. Cuando es acumulado en el estómago tiene como causa principal tragar aire cuando se come o se bebe y se elimina a través del eructo. Sin embargo, los gases intestinales que se forman en el intestino grueso o colon, se originan cuando las bacterias de la microbiota intestinal fermentan los hidratos de carbono, como la fibra, que no se digieren en el intestino y, aunque las bacterias consumen parte de ese gas, el resto se libera en forma de flatulencia.
El aumento de gases o el dolor que provocan puede deberse a varios motivos, principalmente, a causa de consumir alimentos que son más propensos a generar gases.
Algunas acciones como masticar chicles, ingerir bebidas gaseosas o fumar pueden producir un aumento mayo de la ingesta de gas.
En muchos casos, hacer simples cambios en el hábito alimenticio que pueden disminuir la presencia de gases.
Los gases también pueden ser un síntoma de algún otro problema en el sistema digestivo. Habitualmente puede ser por alguna intolerancia como puede ser a la fructosa, lactosa o gluten, por la dispepsia funcional, enfermedad por reflujo gastroesofágico o el síndrome del intestino irritable.
La toma de ciertos medicamentos o antibióticos que pueden interferir en el equilibrio natural de la microbiota intestinal también puede producir un aumento de gas y de molestias.
Ya hemos hablado anteriormente sobre la unión entre la microbiota intestinal y el cerebro, que a su vez establece relación entre enfermedades o problemas psicológicos con causas intestinales y viceversa. Por lo tanto, los gases también pueden ser un síntoma secundario de una patología psicológica como el estrés o la ansiedad.
Otras causas de la formación de gases pueden ser acciones que realizamos de forma inconsciente al beber de una pajita o directamente de una botella.
¿Cómo se manifiestan los gases intestinales?
La principal forma de notar un aumento de la cantidad de aire en el tracto digestivo es por un incremento en la expulsión de los gases a través de eructos o flatulencias. La hinchazón o distensión abdominal, ruidos intestinales o el dolor abdominal son otros de los síntomas o consecuencias de los gases.
Como hemos mencionado, los gases intestinales pueden ser indicio de alguna enfermedad intestinal por lo que, si perduran durante varios días y no se reducen, es aconsejable acudir a un/a especialista para que te valore y pueda determinar a qué se deben.
Consejos para aliviar los gases intestinales
Teniendo en cuenta que la alimentación tiene un importante papel en cuanto a la formación de gases intestinales, por lo que, para aliviarlos, puede bastar con realizar algunos cambios en la dieta.
- Es muy importante comer despacio y con tiempo para masticar bien los alimentos.
- Evitar las bebidas con gas, beber con pajita o beber directamente de la botella.
- No beber líquidos durante las comidas o beber poca cantidad.
- Evitar masticar chicle.
- Reducir el consumo de alimentos con alto contenido en carbohidratos ya que son los que pueden resultar más difíciles de digerir.
- Procurar no usar ropa apretada, sobre todo si se va a estar mucho tiempo sentado.
- Intentar realizar un poco de movimiento después de las comidas, no pasar al modo reposo.
Cabe destacar que los gases intestinales pueden producirse como síntoma de otra enfermedad del tracto gastrointestinal, como puede ser el Síndrome del Intestino Irritable o Colon Irritable.
El colon irritable es un trastorno funcional intestinal que provoca molestia abdominal y alteraciones en la frecuencia y/o consistencia en el tránsito intestinal, pudiendo darse periodos de estreñimiento, de diarrea o una combinación de ambos. Los gases, hinchazón y distensión abdominal también son síntomas de este trastorno. Por lo general, se trata de una enfermedad crónica, aunque en algunos casos puede ser esporádica. Este trastorno afecta en gran medida a la vida diaria de las personas que lo padecen.
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Entre los principales beneficios para salud intestinal y bienestar encontramos:
- Mejora de la sintomatología de los Trastornos Funcionales Intestinales
- Mejora de los síntomas asociados al Colon Irritable (hinchazón, flatulencia, dolor abdominal, estreñimiento y diarrea)
- Ayuda a reforzar el Sistema Inmunológico, reduciendo la incidencia del resfriado común y gripe
- Mejora de los síntomas abdominales después de la Colonoscopia (reduciendo los días de dolor)