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Relación entre la microbiota intestinal y las enfermedades oftalmológicas
En artículos anteriores ya hemos hablado de la importancia de tener una microbiota intestinal sana y en equilibrio para la salud del organismo.
La microbiota intestinal, un conjunto de microorganismos que habitan a lo largo de todo el tracto gastrointestinal. El aparato digestivo está revestido interiormente por una estructura mucosa en la que viven en comunidad multitud de bacterias y microorganismos pegadas a las paredes. Principalmente realizan 3 funciones:
Función metabólica. Algunas sustancias que no se digieren en el intestino delgado se digieren en el colon gracias a la microbiota intestinal.
Función de barrera intestinal. Las bacterias de la microbiota ejercen un potente efecto defensivo frente a la colonización de patógenos.
Función de modulación inmunológica. Las bacterias que forman la microbiota intervienen en el desarrollo del sistema inmunológico intestinal.
Cuando se produce una disbiosis o desequilibrio en la microbiota, el organismo puede verse afectado en diferentes aspectos. Esto se produce cuando la concentración de bacterias que habitan en el intestino cambia, disminuyendo el número de microorganismos beneficiosos y dejando vía libre para la colonización de patógenos.
Las investigaciones sobre los efectos en el organismo cuando se produce un desequilibrio de la microbiota intestinal abarcan diferentes aspectos.
Una rama de estas investigaciones se centra en la relación existente entre la microbiota intestinal y las enfermedades oftalmológicas.
Algunos estudios recientes plantean que la microbiota intestinal puede ser relevante en ciertas enfermedades oculares como la uveítis(1), escleritis o la degeneración macular asociada a la edad (DMAE)(2).
Si bien es cierto que estos estudios deben continuar y tratar de esclarecer esta relación con el fin de determinar si la microbiota intestinal alterada es una causa o una consecuencia.
Estas investigaciones se enfocan mayormente en demostrar que algunos problemas oculares relacionados con la microbiota intestinal podrían derivar de problemas autoinmunes en los que el organismo no reconoce sus propios antígenos y produce anticuerpos para atacarlos. En consecuencia de esto pueden desarrollarse algunas enfermedades o problemas oculares.
¿Qué otras enfermedades o problemas de salud están relacionados con un desequilibrio en la microbiota intestinal?
La alteración del equilibrio de la microbiota intestinal repercute en el normal funcionamiento del organismo, por ello muchas investigaciones se centran en establecer estas relaciones con el fin de arrojar luz y ampliar conocimientos sobre ciertas enfermedades.
Algunas enfermedades o problemas de salud que se han relacionado con la microbiota intestinal son, por ejemplo, la obesidad, el autismo, la vaginosis bacteriana, la candidiasis vaginal, la diabetes, enfermedades inflamatorias, los trastornos funcionales intestinales, la artritis, la esclerosis múltiple, algunos trastornos mentales o la enterocolitis.
Gran parte de los estudios realizados en los últimos años sobre la microbiota, tratan la relación entre la disbiosis y las enfermedades gastrointestinales como el Síndrome del Intestino Irritable. Se ha llegado a demostrar importantes diferencias entre la microbiota de pacientes sanos con pacientes con Síndrome del Intestino Irritable o Colon Irritable.
El Colon Irritable es un trastorno intestinal muy común en la población, principalmente en las mujeres y que afecta en gran medida a la calidad de vida. Se caracteriza por síntomas como molestias intestinales, hinchazón, dolor abdominal o alteración del tránsito intestinal (episodios de diarrea, estreñimiento o alternancia de ambos) y se le relaciona estrechamente con factores psicológicos.
Causas por las que se puede alterar el equilibrio de la microbiota intestinal
Los motivos que pueden llevar a una disbiosis son diversos y pueden depender de cada persona. En general se puede decir que una mala alimentación, la toma de algunos medicamentos como los antiinflamatorios o los antibióticos, algunos tratamientos, algunas patologías o el estrés, favorecen la alteración de la microbiota intestinal.
Realizar ejercicio de forma regular, seguir una dieta variada y equilibrada y los probióticos, son algunos ejemplos de formas de ayudar a recuperar y mantener el equilibrio de la microbiota intestinal y contribuir a la salud del organismo.
- Peña, M. et al. Focos sépticos bucales en pacientes con uveítis. MEDISAN 16, 1852–1860 (2012).
- Zinkernagel, M. S. et al. Association of the intestinal microbiome with the development of neovascular age-related macular degeneration. Sci. Rep. 7, 1–9 (2017).