¿La menstruación afecta a la microbiota vaginal?
Como hablamos anteriormente en uno de nuestros artículos, la microbiota vaginal sufre cambios a medida que la mujer crece, madura y envejece. En este artículo vamos a hablar de uno de esos momentos de cambio de la microbiota vaginal, en concreto, de la menstruación.
Hay que aclarar que la microbiota de cada mujer es única, es decir, cada mujer tiene una calidad y cantidad de microorganismos que componen la flora vaginal. Además, está en constante cambio, por lo que también es responsabilidad de cada una que esta se mantenga en buenas condiciones. Si se produce un desequilibrio, estamos hablando de disbiosis. Que consiste en la alteración del equilibrio normal de la microbiota, producida por el ataque o invasión de un microorganismo patógeno, o el abandono de los que normalmente se encuentran en la microbiota vaginal.
Normalmente, en torno a la preadolescencia, toda niña desarrolla su primera menstruación. Antes de ello, su microbiota vaginal no era ni siquiera similar a la que tendrá a partir de su primer ciclo menstrual. El primer cambio que se muestra es la desaparición de la microbiota intestinal y de la piel que habita en la vagina de las niñas, para empezar a ser poblada, predominantemente, por Lactobacillus.
Además de todo esto, cuando la microbiota vaginal se estabiliza y pasa a ser la de una mujer en edad fértil, durante el ciclo menstrual varía, sobre todo, en la etapa de sangrado. En este momento la microbiota sufre un cambio de pH y se alcaliniza, esto puede suponer un problema, ya que con un pH alcalino, las bacterias proliferan con mayor facilidad.
El aumento del pH durante la menstruación hace que se produzcan cambios en la microbiota, entre los que encontramos el aumento de la bacteria G. Vaginalis y disminuyan los niveles de Crispatus. También proporciona nutrientes a bacterias como Gardenella o Prevotella, aumentando la posibilidad de contraer alguna infección por el sobrecrecimiento de las mismas.
Otro factor que, según los expertos, puede afectar son los utensilios para mantener la higiene durante la menstruación. Se refieren a los distintos métodos que existen. Por ejemplo, en países más desfavorecidos, donde tienen menos recursos, las mujeres contienen el sangrado con toallas u otros productos no aptos para esa finalidad. Por otro lado, tampoco aseguran al 100% que haya algún método completamente inofensivo para la microbiota vaginal, debido a los pocos estudios que hay sobre ello.
A pesar de todos estos cambios, lo más habitual es que, tras el sangrado, todo vuelva a la normalidad y la microbiota vaginal se restablezca.
CÓMO MEJORAR LA MICROBIOTA DURANTE LA MENSTRUACIÓN
Desde PlusQuam Pharma, recomendamos Actifemme® Óptima para mantener la microbiota vaginal estable y prevenir así infecciones bacterianas y fúngicas. Es un probiótico que evita los desequilibrios que se pueden dar en la microbiota vaginal, independientemente de si es para combatir los efectos adversos de los antibióticos sobre la microbiota o para prevenir, como en el caso de la menstruación, el desequilibrio bacteriano en la vagina.
También puede ser de ayuda la higiene diaria con el gel íntimo fisiológico de Actifemme®. Este ayuda a restaurar y proteger el equilibrio de la zona íntima, proporciona hidratación y regula y protege el pH.
BIBLIOGRAFÍA
https://titula.universidadeuropea.es/bitstream/handle/20.500.12880/7435/TFM_Bienvenida%20Alexandra_Correa_Cevallos.pdf?sequence=1&isAllowed=y
https://www.biocodexmicrobiotainstitute.com/es/periodos-menstruales-y-microbiota-vaginal-el-progreso-de-la-ciencia#%C2%BFc%C3%B3mo-evoluciona-la-microbiota-vaginal-durante-el-ciclo-menstrual